Wagner, que que é essa buzenga no seu avatar, meu filho?
Bem, todos sabem que tenho uma conta de email portenha para ocasioes como essa na qual o 11 cardas bateu o arquirival mundial do meu time, assim...Teremos 11 e Porto em Tóquio. Chega de conversa, direto de la redacción en Buenos Aires y del enbiado especial a Manizales para A Saidera:
<span style='font-size:21pt;line-height:100%'>El campeón cayó en su ley</span>
Boca se la bancó bien en Colombia y pudo ganar durante el partido, pero falló todos los penales y por eso se quedó sin corona.
<span style='font-size:8pt;line-height:100%'>
Adrián Piedrabuena.
apiedrabuena@ole.com.ar (2'7") </span>
............................................................................................................................................................
Cangele y el Pato, figuras, y el consuelo final del Virrey.
Notas relacionadas
Momento Rexona
El plan Cangele casi le resulta...
La cantidad no hace a la calidad
No se merecía este final
Y... alguna vez les podía pasar
Perdió una final, pero acababa de ganar otra
Y no pintó el Chicken Dance
El ídolo que ya es una leyenda
"No sabía que había medalla"
Boca abajo
El Pato atajó para otra vuelta
Es el nuevo Higuita
MANIZALES (ENVIADO ESPECIAL). A su juego, una vez más, parecía que lo habían llamado...
A Boca le llevó 141 minutos quebrar una defensa que parecía de granito. Hicieron falta un par de quiebres de cintura y cambios de velocidad de Cangele, un centro del zurdo por el foul que recibió y un cabezazo de Burdisso. Sí, ¡cuántas imágenes tenés de Nico agarrándose la cabeza! Esta vez fue de emoción, de gratitud, de despedida, de gol (no merecía lo que pasó después).
Al Pato Abbondanzieri le llevó un minuto del partido para bañarse aún más de gloria. Fue a los 24 del segundo tiempo, cuando le tapó un derechazo a Jefrey Díaz, un zurdazo a Valentierra y un cabezazo a Viáfara.
A Boca le llevó 180 minutos quedar parado delante de otra chance histórica: por penales tenía que definir la Copa.
Al mismo Abbondanzieri le llevó tres penales seguir aumentando el mito, con dos tapadas ante los remates de Valentierra y Ortegón. Vale la reiteración: a su juego lo llamaron, pero...
Por primera vez en la era Bianchi en Boca, un pero surgió en el camino de este matrimonio que hizo historia en la Libertadores. Un pero humilde, sacrificado, tenaz, sorprendente y, sí, amarrete. Un pero llamado Once Caldas. Un pero hecho misil en ese zapatazo increíble de Viáfara. Un pero con mirada fiera, estilo felino, ahora héroe y de apellido Henao.
A este Boca con aire de imbatibilidad lo mató su propia ley: los penales. Y de una manera histórica también: no metió ninguno de los cuatro que pateó. Esa ineficacia fue la que lo dejó sin la corona de América. Una falta de gol que sufrió en las dos finales. En la Bombonera arrinconó a los colombianos, y nada. Ayer manejó la pelota en varios momentos como si estuviera en Buenos Aires, pero no tuvo ideas, peso ni desequilibrio en el área rival.
Tevez jugó mal, pero no es el único culpable y estuvo a un pelito de definir el partido con una jugada maradoneana. Guillermo Barros Schelotto se lastimó en el calentamiento y Cangele fue decisivo para generar el foul del 1-1, para enviar el centro y, por sobre todo, para ser la principal referencia ofensiva, la descarga siempre dispuesta para recibir, el jugador de campo distinto de esta revancha.
Con la mentalidad habitual, la presión de costumbre, la recuperación de pelota rápida y una imprecisión no tan acostumbrada, Boca buscó levantar ese 0-1 rápido, lo consiguió, pudo ganarlo y también perderlo.
Boca no llegó a la sexta Copa porque Schiavi tiró el penal alto, a Cascini y Cangele se los atajaron y el de Burdisso dio en el travesaño. Es duro de asimilar cuando el rival no surgía tan fuerte como Palmeiras o Santos, por ejemplo. Mientras el estadio Palogrande era una fiesta impensada hacía un mes, Bianchi se metió en la cancha y abrazó a todos sus jugadores. Es el final de un serie exitosa, histórica e ¿inigualable? Una serie que cayó en su ley.